Seguro que en más de una ocasión te han pillado comiendo, fregando platos o viendo el culebrón venezolano en la sobremesa. Igual estabas en el baño -en tu “momento all-bran” o en el momento “mi agüita amarilla” o haciendo lo que cualquier adolescente a las 4 de la tarde en época de exámenes- o a punto de salir, con los niños correteando por el pasillo y pateando la puerta del vecino calvo cabrón que tienes en la puerta de enfrente y que gasta
una mala leche de mil pares.
Sabes que una vez por semana, como mínimo, te pillará. “Hola, buenas tardes, ¿podría hablar con el señor…”. ¡Mierda! Sabes que estás perdido. No es tu colega, porque siempre empieza con aquello de “¿Qué pasa cabesa?” y nunca te diría “señor”. Tampoco es tu madre, que es más de “Y mi niño bonitoooo” (a pesar de que ni eres niño y, mucho menos, bonito).
Es ella. La Xxxx teleoperadora de turno que te llama para ofrecerte desde la última colección de la enciclopedia Espasa Calpe (creedme, existe todavía), una vaporetto inútil o, la estrella, ¡El ADSL divino de la muerte mejor que el de Telefónica!
Pues bien, el Conde ha desarrollado toda una serie de conductas evasivas que han dado sus frutos y que, sin más dilación, pasa a compartir.
CASO 1
Llama la operadora para ofrecerte un curso de XXXXXX.
SOLUCIÓN AL CASO 1
Eres profesor de XXXXXX.
Consideraciones al caso 1: es infalible salvo en los casos de cursos de inglés. La tía siempre, repito, siempre, te intentará convencer de que tu nivel de inglés no es lo suficientemente alto. Repite conmigo: F I L Ó L O G O. Es la única forma.
Si sólo es un curso de informática, te bastará con que eres ingeniero informático, etcétera.
CASO 2
Llama la operadora para ofrecerte una línea de ADSL baratísima y que abandones la tiranía de tu operador habitual
SOLUCIÓN AL CASO 2
Nunca intentes aquello de “lo siento, estoy muy contento con Telefónica”. EEERRRR. Error.
Te dirá que si no quieres pagar menos y bla bla bla.
Aunque te cueste, porque seas un internauta compulsivo, nunca falla eso de “¿Intenné? Uy, ¡qué va! Aquí no tenemos ni portátil. Lo poco que lo uso es en el trabajo y ahora vamos a quitar hasta la línea porque -ES IMPORTANTE ESTO- me han dado un móvil de empresa.
Comprobado: funciona y suele resultar convincente. Es necesario que el “¿Intenné?” suene a una mezcla entre ofendido y “no-tengo-ni-puta-idea”.
CASO 3 (Muy habitual en los tiempos de crisis)
Comercial con ojitos de cordero degollado que te ofrece una VISA ORO y te ha pillado en el centro comercial de turno al bajar la escalera mecánica. Estás en blanco porque mirabas las tetas de la dependienta del Zara de abajo.
SOLUCIÓN AL CASO 3
Tras varias pruebas, el método más sencillo lo teníamos ante nuestras narices. No funciona lo de “ya tengo varias”. Intentará entonces que tengas una más y que des de baja las otras porque la suya es mejor. Tampoco funcionará lo de “está la cosa mu mala”. Te dirá que es la solución…
…y la solución es muy sencilla. No importa que ganes 3.000 pavos limpios al mes. Apúntate esto: “Mi’arma, estoy más parao que la má. Se me agota el paro el mes que viene” (Cara de pena ‘mode on’). Si fuera posible adornar la escena con un enano que no pare de pedir que te pueda servir de excusa, mejor. Te acabará regalando un boli.
CASO 4
Vendedor en puerta para ofrecerte lo que sea (también válido para testigos de Jehová y diversos tipos de predicadores de puerta en puerta)
SOLUCIÓN AL CASO 4
Éste es de los jodidos. Desde el Departamento de Evasivas de la Universidad Canalla hemos estado desarrollando éste método durante varios meses. Y la solución es sencilla: Lo que sea, ya lo tienes. Es más, tienes dos. Que te ofrecen la vaporetto de las narices, la tienes. Que te ofrecen la famosa colección de “Érase una vez la vida” con los DVD y el plasma, respondes: “La tengo, junto a la de …cómo era Jose…ah sí, ‘Érase una vez el cuerpo humano’…nos encanta, sí”. Se irá a los pocos minutos.
Si es para un rollo religioso/secta, dices que te saliste y que, es más, les puedes enseñar a ellos cómo salir. No falla: salen zumbando porque se sienten mal.
Mi padre les preguntaba por si tenían libros de informática y a veces también funcionaba…
CASO 5
Hipermercado en navidad con mujer que te ofrece lo que sea en una bandeja pero que ya sabes que no se quedará contenta hasta que le compres el turrón, la caja de langostinos, etcétera.
SOLUCIÓN AL CASO 5
Ésta está chupada y no nos vamos a extender: ¡Eres alérgico a lo que sea!
Siempre funciona.
En fin Canallas, por hoy creo que con estas clases podréis sobrevivir en el mundo de asalto telefónico y callejero en el que vivimos.
Saludos cordiales
Comentarios recientes