“Houston, houston, tenemos un problema…de mierda”, rezaba el último SOS lanzado desde la Estación Especial Internacional. El último episodio de la Guerra Fría está teniendo lugar a cientos de kilómetros de altura. Fuera de la esfera terrestre, unos cuantos estadounidenses y un puñado de rusos se pelean por un inodoro nuevo.
El cosmonauta Gennady Padalka está harto del asunto del WC y ha montado en cólera en The Guardian. Critica agriamente a los americanos porque no le dejan utilizar el “Roca” de última generación donde depositan la ‘basura espacial’ que sale de sus cuerpos. No es coña. Los de EE.UU. han mandado a sus astronautas un váter acojonante. “Es más cómodo y lujoso”, aseguran desde arriba. [...] A ver cómo coño es un WC “lujoso”. Me imagino a la limousine de los baños.
También tienen problema con la bicicleta estática, pero ése es otro problema…
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